Dicen que al mal tiempo buena cara, que después de la tormenta siempre llega la calma, pero que al fin y al cabo las cosas nunca cambian. Que todo lo que sube baja, pero que agua que pasa, no mueve molinos. También dicen que todo el mundo merece una segunda oportunidad, pero que segundas partes nunca fueron buenas, que quien tiene boca se equivoca y que rectificar es de sabios. Que querer es poder y hace más quien quiere que quien puede, pero que quien todo lo quiere todo lo pierde, además que de donde no hay, no se puede sacar. Que quien no arriesga no gana, que quien la sigue la consigue. Que no por mucho madrugar amanece más temprano, pero que a quien madruga, Dios le ayuda. Que si te pica te rascas, que todo lo que escuece cura. Que no hay más ciego que el que no quiere ver, que a palabras necias oidos sordos, pero que a buen entendedor, pocas palabras bastan. Que la confianza da asco. Y que quien no corre vuela, que ya se sabe que las apariencias engañan y que por supuesto, que no es oro todo lo que reluce. Y mira, qué quieres que te diga, si quien avisa no es traidor, que si te he visto no me acuerdo, y que a rey muerto, rey puesto.
lunes, 28 de noviembre de 2011
miércoles, 23 de noviembre de 2011
Regala tu ausencia a quién no supo valorar tu presencia .
Hazme caso, vive muchos años, vive intésamente, bebe hoy hasta que desvaríes, comete todas aquellas locuras que de solo pensarlo, hacían que se estremeciera tu corazón, adopta las leyes y el dios que tú mismo establectas, atenta contra su corazón, sin compasión, sin callarte nada, sigue a tus impulsos, sube la música hasta que los tímpanos te exploten, pégate contra la pared y grita de puro placer, baila o besa apasionadamente debajo de la lluvia, fíate de tu sombra, miéntele a la mentira, y a la verdad también. Sonríe hasta la saciedad, suda, hártate a batidos de los que engordan, respira de la forma más rara posible, aprende todo aquello que te pongan frente a la cara, enámorate y comete las estupideces que esto conlleva, ríete hasta que acabes vomitando, y enfrentate a la muerte una y otra vez, preferiblemente, a una distancia prudente. No pienses antes de actuar, porque no te servirá de nada, gritale al mundo que sientes cuando te toco, baila sin música hasta desfallecer, pierde las llaves de casa y que no te preocupe lo más mínimo, da vueltas hasta marearte y caer al suelo, gana todo aquello que esté en tu mano, haz el loco y vuelve cuando amanezca a casa, duerme en la playa cuando llegue el verano, comete errores y no te arrepientas. Mete la pata y no te avergüences, no escondas los sentimientos, llora si así lo sientes. No sigas las modas si no es lo tuyo, lo finjas ser quien no eres, salta al vacío simpre con la verdad por delante, ólvidate de todo aquello que implique trabajo, recorta la palabra monotomía del diccionario, pero, ante todo, antes de cualquier cosa que se te pase por la cabeza, no me olvides, no me olvides nunca.
martes, 15 de noviembre de 2011
jueves, 3 de noviembre de 2011
Nadie puede darme lo que tú me das.
¿Sabes? Yo también sé porque te quiero. Porque haces las cosas fáciles, y porque si tuviera que elegir un lugar para vivir, sería tu cuarto. Porque los días que no puedo más apareces con una sonrisa y me salvas como si nada pasase. Porque el día que dije que no al amor, apareceste tú haciendome cambiar de idea como de costumbre. Te quiero, por tu sonrisa y tus ojos, tus manos y tu forma de tocarme. Te quiero los lunes por la mañana y los sábados por la tarde. Te quiero en mi cama, en el parque, aquí o en Londres. Te quiero conmigo siempre.
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