El tiempo pasa, pero no te olvidamos.

Dime cuando te olvidaste de nosotros por completo,
comentame cada uno de tus sufrimientos si es que los puedes recordar.
Explícame por que te vas
así sin más,
sin dejar rastro, sólo recuerdos.
Por qué, tú la que tanto me hizo luchar a mí, a nosotrosm
se deja ganar y pierde contra una enfermedad.
Cuéntame otro cuento, hazme otro bocata de lomo.
Besame la frente y arrópame.
Sonrieme, como si recordases a tus nietos,
a tus hijas y nueros.
Abraza a tu marido y llámale por su nombre,
devuelvenos tus refranes y tu sabiduría,
tu paciencia y tu alegría.
No te vayas, aún no estamos listos.
Quédate un rato más,
despídete con un buen abrazo, fuerte
muy muy fuerte,
no nos dejes olvidar.
Levantate de ese sueño tan profundo y
vuelve, a caminar, a correr y a regañarnos.
Regalanos tardes delante de una chimenea ,
haciendo como si las horas no pasasen.
Hazme enterder una vez más lo importante que es la familia.
No me dejes que te olvide, no lo hagas.
Lo siento, nunca te llegue a decir lo que te quería, ni lo que te apreciaba.
Espero que lo sepas, desde donde estes, desde donde
nos cuides, sepas que tu niña pequeña siempre se acordará de ti, abuela.